Esto tiene pinta de ser el típico post personal para desahogarse. Yo aviso para que nadie lo lea si se espera algo divertido e ingenioso (mi tónica habitual, vamos). Acabo de ver Mi vida sin mí, esa gran obra maestra de Isabel Coixet. Que algunos dirán que ella es insoportable y que sus películas son lentas y lo que te dé la gana. Mi vida sin mí es genial. Y punto. Hay pocas películas que me hagan llorar desde casi la mitad, con una música que te persigue incluso días después de verla. Sólo me salen tópicos y no voy a escribirlos, pero hasta estar escribiendo mientras lloras sobre el teclado como una idiota es bonito y muy Coixet. Y repito, al que no le guste que se joda. Me gusta pensar mi vida como una película. Con cosas patéticas y otras extremadamente bonitas. Es mucho más divertido. Quien me conoce bien sabe que es así.
Me gustaría alguna vez en la vida escribir algo que hiciera llorar a alguien. Un cuento, una novela… no me refiero a una carta a alguien que aprecias porque eso es distinto. Eso lo hemos hecho todos. Es bonito hacer llorar a alguien, y si es de emoción todavía más. A mí me gusta llorar, pero sé que lo que más le gusta a la gente es que esté contenta, me lo dicen. A mí también me gusta estar contenta, pero bueno… llorar tampoco está mal. Y llorar y que después me hagan reír, lo que más. Lo que me pasa con las pelis estas es que al final ya no sabes por qué estás llorando. ¿Es por la peli?, ¿es por ti?, ¿es por la música?, ¿es porque ya has empezado y no sabes parar? El caso es que es bonito y también hay que disfrutar de los momentos tristes. Es mejor estar triste que estar aburrido (hombre no siempre, pero al menos así sientes algo).
Afortunadamente, para eso están las películas repetidas, para verlas en el sofá con una manta y sentirse todo lo triste que una quiera sin fastidiar al resto. ¿Y para qué escribes este post entonces? Según tú deberías pasar y dejar de dar la brasa. Pues sí, mira tienes razón. Pero la gente que me conoce también sabe que no hay que tomarme demasiado en serio, sobre todo cuando hago afirmaciones categóricas.
En fin, que ya me siento menos peor. Perdón por la charla.
Today your blog, tomorrow the world 
No deberías disculparte. Bueno, yo también me disculpo siempre y doy las gracias, jejeje.
Repito tu máxima, es tu blog y haces lo que te da la gana.
A mi me gustan estos post. Bueno si no existiesen este tipo de post yo ni siquiera existiría. Ni mis comentarios tampoco.
Pero está bien escribir lo que se siente. Así conocemos más a Ana. Arándanos es genial y fabulosa, eso ya lo sabemos. Pero a Ana no la conocemos tan bien. Es como un yo a la inversa. Mi parte negativa es Mameluco. Miguel es más alegre (unas micras más alegre). Somos los mismos pero diferentes.
Y que se jodan todos. Hay que ser egoistas de vez en cuando. Y preocuparse por uno mismo. Y llorar si se quiere llorar y escribir los post sin pretender ser brillante ni audaz ni genial.
Escribir porque si.
Es cierto que yo lo llevo a un extremo demasiado exagerado, pero estamos hablando de tí.
A mi me ha gustado tu post, porque está hecho con la fuerza de la tristeza…
Y la tristeza es un estado de ánimo como otro cualquiera. Hay que aprovecharlo cuando está, procurando que no dure mucho tiempo, porque sino te conviertes en algo que no me gustarías que fueses tú, por nada del mundo, Ana.
Tú eres fuerte, joder.
Tú ya sabes que mereces la pena.
Y con tu juventud y con tu inteligencia puedes permitirte unos días malillos, Ana. De todo se aprende. Pero solo unos días. ¿eh?
Mameluco estará por aquí para las duras y las maduras…
«Mi vida sin mí» es una película dura, que te pone un nudo en la garganta desde los títulos de crédito, porque ya intuyes que sucede algo terrible. Y resulta que esas cosas, las que suceden en la peli, pasan, a nuestro alrededor, constantemente, puedo asegurarlo.
Pero resulta que es una película muy positiva, un cuento de hadas. Que emociona también por eso, porque ves a alguien sobreponerse hasta el éxito, por muy descabellada que sea su empresa final.
No te puedes imaginar la impresión que causas tú, siempre positiva, afirmando sin vergüenza que estás triste, por un instante aunque sea. Es humanizador. Encantador, vamos.
Hacer llorar es más fácil que hacer reír (al menos para mí). Pero dejé de escribir esas cosas para evitar depresiones.
Estoy contigo y con Mameluco. Es un blog, no un libro ni ningún tipo de proyecto con un tipo de inspiración fija ni nada de eso; pones lo que te salga de las narices. De hecho, tanto mejor, porque lo bueno del blog es que, a la vez que muestras dotes de escritura, de saber encandilar al lector, con post como estos sólo consigues ganártelos un poco más.
Es eso: Ana Arándanos nos hace los Podcast, saluda sonriente desde fotos con copas y muestra en Internet una parte de ti… pero esta parte es tuya, es personal. Igual que Mameluco se desdibuja con Miguel en los posts, o yo dejo mostrar que detrás de Seth Fortuyn hay alguien (cuyo nombre, si tienes ánimo para ello, puedes buscar :P), a quien le preocupa algo más que el que un enemigo suyo le lance gente enferma para que le den abrazos.
A mí personalmente, igual que disfruto con Rambo, Con Air, La Jungla de Cristal, el terror, la ciencia ficción… de vez en cuando gusto de conectar con películas diferentes. No estoy hablando de pelis japonesas, no estoy hablando de Tetsuo… estoy hablando de las películas de Meg Ryan (cómo ha caído, la pobre), Lost In Translation, Las Reglas del Juego (el suicidio de la chica me dejó que no sabía si llorar o seguir impávido el resto del filme), las películas de Frank Capra (Qué Bello es Vivir me la veo todos los años, coño!), El Verano de Kikujiro… y así. En el fondo, soy un moñas. (psst… me encanta Karekano, manga y anime japonés pasteloso, lleno de romances de instituto).
Es la magia del arte: hacernos sentir como el autor, si es diestro, quiere que nos sintamos. Y por supuesto que no es malo, sino bueno. Un mono le mea en la boca a otro y provoca las risotadas del resto de monos, pero poco más; nosotros colocamos al señor Stewart a punto de suicidarse, para acabar descubriendo la alegría de vivir, y se nos saltan las lágrimas (al menos a mi). Eso es ser humano. Ser humano también significa muchas otras cosas, pero no es plan de desvirtuar el comentario.
En fin, que como decía, SOY UN MACHO IBÉRICO. Y SOCIÓPATA. (ejem… ;))
Por cierto, tengo un poema en mi blog del que me siento particularmente orgulloso, por haber hecho llorar a una amiga y, casi casi, a mi padre. Es este. Espero no quedar como un gilipollas oportunista para darse publicidad, porque solo quiero compartir el poema 😉
Un beso!
Con las pelis melancólicas y/o tristonas pasa como con las de terror. Mola pasar miedo en el cine, porque sabes que bajo tu cama no hay un muerto esperando a abrazarte cuando te tumbes, o que no vas a imaginártelo durante meses. Por eso lo de que hay que disfrutar de los momentos tristes (no autoinducidos por pelis) no me convence, o será que no se como se hace.
«Mi vida sin mi» me gustó mucho cuando la ví, pero como se supone que los chicos no lloran, ni esta peli, ni casi nada ya, consiguen sacarme lagrimitas. En fin, que aunque muchos digan que todo lo que hace Coixet sigue recordando a anuncios de compresas, Coixet mola y «Sometime Later» te pone los pelos de punta si o si.
veo q del otro lado del charco
tambien lloran sobre el teclado
y que no soi la unica
🙂
si yo se lo q se siente
i no pidas disculpas
muy tu blog i poedes scribir lo q qieras
si no les gusta q no lo leaan
bsos nena
Pese a que Isabel Coixet no es un personaje a quien procese veneración y a que me parece alguien digna de salir en un Celebrities de Muchachada Nui, hay que reconocer que en lo suyo es buena (en eso de hacer películas, vaya…)
En cuanto a tu estado anímico, que decirte,… que es natural. Las hormonas, los cambios de estación, la vida,… son circunstancias que a veces provocan tristeza. Las carrozas con caballos bellamente enjaezados, con una banda de música abriendo el desfile, o un mono vestido de botones son cosas que provocan sonrisas.
Es natural…
Como dice una cita anónima, «Sonríe aunque sólo sea una sonrisa triste, porque más triste que la sonrisa triste, es la tristeza de no saber sonreír».
Leyéndote me he acordado de un poema de Bécquer. En el instituto tenía un profesor que adoraba a este escritor y nos hacía aprender de memoria sus poemas y los teníamos que recitar en clase. Esto lo hacía hasta en Bachillerato, era un tío peculiar. El caso es que había un poema que me ha recordado a lo que he leido aqui:
Los suspiros son aire y van al aire,
las lagrimas son agua y van al mar.
Dime, mujer, cuándo el amor se olvida
¿sabes tu a dónde va?
No te conviertas en un «emo».
Es broma, en un mundo «alegre» hay q disfrutar llorando y perdiendo.
1 besote (jeje)
Si no puedes escribir lo que te dé la gana y cuando te dé la gana, de qué sirve tener un blog.
Muchos ánimos.
Espero que tu tarde de sabado mejorara algo, si quieres te digo como fue la mia, a ver si te hubiera animado:
Tortitas en un mitico local con una NO-amiga
Compra electronica de regalo del dia de la madre con la NO-amiga
Abrazo marca de la casa sobre quicio en feudo contrario
Peli de gabacha flipada con palomitas de mantequilla
MIradas furtivas constantes a la ropa interior de mi NO-amiga
Vuelta a casa escuchando a Interpol
Ya me diras si una tarde de este tipo te hubiera alegrado el dia… al estilo de Harry «El Sucio»
Vaya, parece que necesitas visitar
http://www.radiolibredepresion.wordpress.com
No le digáis eso a Arándanos ni de broma, amigos de radiolibredepresión…
Citando a Chiquito de la Calzada, una mala tarde la tiene cualquiera…
o una semanilla.
Ana: 🙂
No suelo escribir en los posts de deshaogo (bueno ni en ninguno), pero no he podido evitarlo. Si no hubiera sido por Mameluco, cuyo comentario me ha animado a pinchar en el enlace, no me habría muerto de risa. Yo pensaba que era Radio Libre de Presión, en plan medio de comunicación independiente. Al menos la página esa funciona. Sólo con la portada me he sentido mucho mejor. No estaba depre, pero ahora empiezo a empollar con una sonrisa.
Ahí estamos ana…con un par de arándanos
Mameluco: nada nuevo le voy a decir, que muchas gracias y que ya estoy mejor 😀
HombreRevenido: estoy de acuerdo, por muy triste que sea, terminas de ver la peli y tienes un montón de ganas de vivir las cosas de la vida. Jo, es cojonuda. Por cierto, ¿qué te parece que se enamore del tipo con barbita? Tengo un amigo al que le parece súper indecente.
Seth Fortuyn: vi Qué bello es vivir hace 2 navidades y la verdad es que me gustó…
Sergio: Sometime Later no la he visto, es de coixet? Sabía que había una con no-sé-qué del amor en el título, pero no recuerdo. Si es así, me das una alegría porque me gusta saber que hay pelis suyas que aún no he visto (como con Woody Allen).
Ninia Shuy: muchas gracias, charquera 😀
Serjuzu: estoy contigo, es súper celebrities (ahí va qué chorrazo). Por cierto, ya estoy mejor muchas gracias por los ánimos.
Mooringrope: qué envidia me das, yo nunca he tenido profesores de literatura que nos hicieran fliparnos con libros. Te flipabas con tus cosas, peor no con lo que te contaban en clase. Es bonita la poesía.
Trompo: no jodas, emo… Jajaja.
Kermit: pues sí, es verdad. Gracias, majo.
leon rehgallag: jajaja, ya veo que tienes claro que qué categoría no meter a tu NO-Amiga… tiene buena pinta tu tarde, aunque está muy feo eso demirarle la ropa interior a las chicas. Cualquier día te denuncian y la hemos armado.
Radiolibredepresion: no te pases…
Jose Chupa: no pierdas el enlace que quizás después de trabajar conmigo más semanas te toca visitarlo.
ATSO: Jajaja, sí, otra cosa no pero de eso…
Arandanos siento desilusionarte, No es otra peli de la coixet, Sometime later es la canción que sale en «Mi vida sin mi». Esa lentita que empieza con esos acordes de teclado y con esas cuerdas que te rasgan un poquito la alegría cada vez que suenan. Esta vamos:
Nota curiosa y sabiondilla. Empieza igual que este otro temazo de Lee Hazlewood:
Un saludo y ánimo con los bajoncitos. Esto aún no es tu trabajo, asi que puedes y debes hacer los podcast sólo cuando te apetezca.
a mi esta película de la coixet me deshizo… es un billete de ida a la tristeza
espero que ya tengas el de vuelta
juanlu
La verdad sea dicha, molan las pelis que te hacen llorar. Yo lloré con «La fuente de la Vida», una peli de un director que me gusta y que me emocionó. Supongo que las que más llegan son las que plantean las situaciones más humanas, como «Mar Adentro». No he visto la película de la que hablas, pero me imagino que será de ese estilo.